viernes, 13 de agosto de 2010

Yo también…

Yo también (old, from Hi5)…
Yo también he soñado, y he visto derrumbar muchos de esos sueños que nunca van a materializarse, aunque algunos otros se han logrado volver realidad. Yo también siento cansancio, al afanar y afanar y no ver llegar los logros que tanto me cuesta ver materializar. Al invertir de mi tiempo y energía vital, persiguiendo aquello por lo que entiendo es justo y es digno trabajar para tratar de alcanzar.
Yo también he herido, he amado y he sufrido. Yo también se lo que es llorar por alguien que amas, y que no se da por enterado, de lo mucho que deseas estar a su lado.
Yo también se sentir, el miedo y el dolor y la decepción, el sufrimiento y la desesperación, al no lograr sentir la paz en la confianza sobre la certeza de la verdad. Al ser testigos de tantas señales, que si bien las he dejado pasar, no deja de ser verdad que me ponen a dudar, porque como que no me cuadran con la realidad.
Yo también tengo mis expectativas, he acumulado mis anhelos, y me gustaría verlos satisfechos, sabiendo que estoy tomando las decisiones correctas, en correspondencia con la madurez y la inteligencia de la que se supone me he hecho a lo largo de todos estos años.
Yo también sé desconfiar, ante aquellas incoherencias del destino, que más que errores cometidos vienen a significar desaciertos de la honestidad que a cada quien le toca sembrar en las distintas relaciones que nos toca manejar.
Yo también he experimentado, la ternura del cariño cuando te pierdes en las sensaciones que te inunda al quedar totalmente perdido en la sonrisa de un bebecito, o en el abrazo de un niño, cuando sin prisa y sin afán, sin temores ni mezquindad hace un desprendimiento de amor puro y cariño genuino.
Yo también sé callar, sé mirar y se aguantar, poniendo todo mi empeño para la prudencia mantener, aun ante aquellas situaciones donde la injusticia cometida demandaría una manifestación pública de desacuerdo.
Yo también sé hacer jugadas forzadas, acomodando a mi conveniencia las ficha en el tablero, todo con el sincero deseo de querer que las cosas se hagan a mi manera.
Yo también sé ser paciente, se pelear con el tiempo, sé esperar y se lo que es deponer el deseo de ver materializado las cosas que quiero en el presente, sabiendo que es mejor que lleguen en un tiempo mas adelante.
Pero todo esto, lo que he aprendido y he llegado a saber, no me llenan de la paz que tanto soñé. Porque estoy totalmente convencido de que no vale de nada mientras lo reserve para mí solo, por eso espero con ansias, pero no con prisa, a que llegue ese día…

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